miércoles, junio 21, 2006

ROCK'N'ROLL







“ No has visto aún nada “

Recordé luego estas primeras palabras de Luke . Pero dejó inmediatamente de hablar para pasar a la acción . De detrás de su cuerpo sacó dos espadas artesanales ( fabricadas al estilo de los ‘pinchos’ carcelarios , según me dijeron después ) , y me alargó una de ellas ( el muy perro no me dejó elegir el acero ) .

Al instante se puso en guardia . Afortunadamente , hace varios años me dio una temporada por la esgrima , y todavía me acordaba de los rudimentos .


Pero no llegó ninguna sangre al río . El tipo de la chaqueta blanca sacó una especie de mando a distancia de color blanco , apretó algún botón y Luke quedó paralizado , aunque con los ojos echando chispas eléctricas .


- No se apure , habíamos previsto alguna reacción de esta clase , y para el caso está este aparatito – dijo el menda exhibiendo el mando a distancia

Apenas había acabado la frase , cuando Luke mete la mano en su chaqueta paramilitar , y saca un mando a distancia blanco , algo más grande que el del técnico , mientras su cara se convertía en una mueca levemente sonriente .


Para asombro de los presentes , Luke paralizó al jefe de los técnicos , primero , y después a todos los demás subalternos .

Yo , la verdad , no sabía a que atenerme , pero por si acaso no solté el improvisado acero . Claudia , sin embargo apenas parecía sorprendida . Ni siquiera se puso fuera de alcance .Entonces Luke se dirigió a mí :

-Coge la factura . Está en el mostrador , la primera del montón . Y nos largamos a casa , ¿ No? ....

Curiosamente , ese “‘¿no?”’ , me sonó casi suplicante .


Y eso es lo que hicimos .

lunes, junio 19, 2006

El círculo estático





El teléfono pega un alarido . Lo atiendo de inmediato . Minuto y medio más tarde , lo cuelgo .

Era la gente del servicio técnico . Mejor dicho , el jefe de los técnicos de mantenimiento . Que Luke estaba ya listo , pero que no podían llevármelo . Le pregunto el motivo , y entonces el tipo duda , carraspea , y al cabo me dice que no pueden , porque Luke insiste en que .... vaya a recogerle personalmente .

Mi interlocutor parece un tanto preocupado , o eso me lo parece . Así que sólo le pregunto si es peligroso , no si es ‘normal’ . Entonces el jefe me dice que no debería de preocuparme , pero que no son capaces de restablecer todas sus variables . “ Pero funcionar, funciona “ .

Ok . No le pregunto nada mas . Quedo en pasar por el servicio por la tarde . EL jefe suspira , como aliviado , y cuelga .


Dos horas después , me dirijo en la furgo a casa de Claudia . Milagrosamente , está , y responde al portero automático . Una suerte , puesto que no la he llamado de antemano .

Ya delante de la puerta de su piso , Claudia aparece con un aspecto desaliñado , como recién levantada, pero su mirada está muy despierta . Le explico que tiene que acompañarme a recoger a Luke , pero Claudia afirma que no sabe de que le hablo .

Dudo entre volver a refrescarle la memoria , y contarle con pelos y señales como empujó a mi máquina por el desfiladero , o pasar de todo y largarme .

Elijo lo segundo . Pero entonces Claudia me dice que espere dos minutos , que me acompaña . Ante mi gesto interrogante , añade que se estaba aburriendo en casa .


Los dos minutos se convierten en casi media hora , que paso escuchando la radio dentro de mi furgoneta . Por fin aparece Claudia . Su aspecto no ha cambiado mucho , la verdad . En todo caso , está alegre , casi contenta . Se pone a hacer karaoke con el tema que suena en la radio . Me fijé en que llevaba cada zapato de distinto color , y modelo .

Llegamos sin más sobresalto al servicio técnico . En el mostrador del pabellón industrial que lo albergaba , no nos preguntaron nada , sino que el elemento que estaba al frente le hizo una seña a otro que estaba en un lateral . Éste , salió disparado hacia la parte de atrás , y volvió igual de rápido con otro sujeto . Éste último llevaba una chaqueta blanca y se presentó como el que había hablado por teléfono conmigo .


‘Ya nos perdonará las molestias . Intentamos la entrega habitual a domicilio , pero el bicho se desprogramaba en cuanto lo sacábamos del pabellón . Después de la tercera vez , nos dijo que seguiría pasando si no acudía Ud. En persona a recogerlo ‘ .

Típico de Luke , pensé . El de la chaqueta hizo ademán de que le siguiéramos por una escalera de metal . Cruzamos un pasillo de paredes casi desnudas , y tras una puerta reforzada , nos esperaba la figura recostada de Luke .

miércoles, junio 14, 2006

Los pasos pequeños








Ya hace dos años y medio , más o menos .

Yo estaba dando un paseo por la Calle Mayor . No . En realidad no paseaba , porque no iba sin destino concreto . Pero el caso es que en mitad de un manzana de aquella calle , tenía su escaparate una agencia de viajes .


Mi vista vagaba de aquí para allá , hasta que me fijé en la agencia ,que estaba a unos seis metros . Justo delante , estaba una chica mirando fijamente uno de los carteles de oferta . Cuando yo estaba más o menos a tres metros de ella , se gira y me mira de forma rápida . Medio metro más tarde escucho su voz , que me dice :

--¿ Quieres venir a Paris conmigo ?

Una respuesta difícil , desde luego .


Pero , en lugar de decir si sí , o si no , o de que vas? . Lo que hice es dar un chasquido con los dedos , el símbolo internacional de haber tenido suerte .

Ella se echó a reír .

Después de unos segundos de silencio , le dije que era su turno .

- ¿ Turno de qué ?

En ese mismo instante , supe que estaba fingiendo . Mejor dicho , que no se estaba mostrando como la persona que , en realidad , era . Sin embargo , ella reflexionó un instante , es decir , bajó la cabeza unos instantes y la levantó lentamente mientras asomaba una suave sonrisa en su rostro .

- Me parece que no me he equivocado contigo .

- Bueno , en realidad ya he estado en Paris .

- Tremendo error ¿ como podemos subsanarlo ?


Entonces le pedí permiso para hacerle una foto . Aduje que sólo retrataba las cosas más extraordinarias . Buen truco para que no se negara .


Y no lo hizo .


Tardó más de tres horas en decirme que se llamaba Claudia .

domingo, junio 11, 2006

Procurarse una vida cómoda





Tardamos casi 6 horas en poder recuperar a Luke .

Lo que quedaba de Luke .

Su armazón principal parecía haber resistido bien , pues no presentaba daños estructurales , aparentemente . Es decir , que sus extremidades estaban más o menos en sus sitios . Pero su cobertura exterior estaba muy cizallada por los cortantes bordes de las piedras del abismo .

Con la ayuda , forzada ,de Claudia y , más tarde de los tipos del servicio de mantenimiento , conseguimos trasladar a Luke a la furgo de los técnicos .

No nos dijeron cuánto tiempo tardarían en arreglarlo . Tampoco mencionaron nada de presupuestos , ni de facturas . Una pena , porque hubiese aprovechado la ocasión para echarle una mirada de lo más obvio a Claudia .

Esta parecía feliz . Cuando le pregunté si estaba contenta , después de despeñar a Luke , dijo que llevaba así toda la jornada . La mía , es decir, la fotográfica , estaba totalmente arruinada , pues la luz , después de toda la operación de rescate , ahora era de lo más anodino , es decir , intensa y mutilando los colores del cañón .

Así que lo único que nos quedaba era subirnos en mi furgo y emprender el regreso . Evidentemente , mi intención era la de llevar a Claudia a su casa directamente , antes de que se le ocurriera alguna otra gracieta .

Pero , claro , tratándose de Claudia , la cosa no iba a resultar tan sencilla .


Primero se resistió a abandonar el cañón , pues decía que ( ella, de piel casi transparente ) que hacía bueno para tomar el sol . Al poco me propuso jugar al escondite . Aquí me temí lo peor , y me subí de inmediato a la furgo , llaves en ristre , amenazándola con dejarla a pie .

En el viaje de vuelta no pude dejar de permanecer con todos los sentidos en alerta , y no sólo concentrados en la carretera . Cada vez que abría la guantera , o su bolso , mi adrenalina se disparaba .

Un par de veces , estuve a punto de pensar que intentaba coger el volante , pero sólo puso el brazo en el respaldo de mi asiento . Tras el gesto , vino el silencio durante 3 kilómetros .

- ¿ Te lo he contado ..?

- El qué .. – repuse .

- Cómo me soltaron ... de allá ....

- Pues ..., no .

- Fue muy fácil . Más de lo que me hubiera parecido . Sólo tuve que prometerles , más o menos , que no iba a volver a hacerlo . Que quería dejarme de líos . Estar en mi casa , un trabajito cercano y casi nada más . Y , claro , tuve que decirles dónde tenía guardadas todas mis armas . Ya ves qué sencillo .

- Sí , claro , ... sencillísimo .


Puse la radio de la furgo . Sonó una especie de canción protesta .

El aspecto relajado de Claudia era casi amenazador .